Tratamiento con Hilos Tensores

En SkinMed Clinic somos especialistas en tratamiento con hilos tensores.

El tratamiento con hilos tensores es uno de los tratamientos con los que cuenta la medicina estética para combatir la flacidez facial. El tratamiento de hilos tensores cada vez se utiliza más en las clínicas de medicina estética puesto que es una técnica menos invasiva que el lifting para conseguir un efecto inmejorable de reposicionamiento de la masa facial, pero sin cirugía. 

¿QUÉ SON LOS HILOS TENSORES?

Los hilos tensores son unos hilos muy finos utilizados en Medicina Estética para rejuvenecer el rostro. El tratamiento con hilos tensores sirve para combatir la flacidez y recuperar la firmeza de zonas como la cara, el cuello, y algunas zonas corporales como los brazos, mamas, glúteos, abdomen y cara interna de las piernas.

Hay diferentes tipos de hilos tensores, que son básicamente una sutura que puede estar hecha de distintos materiales y llevar o no pequeñas espículas o conos en su recorrido para un mayor anclaje del hilo. Existen hilos monofilamentos, espiculados o cónicos.

¿Para qué sirven los hilos tensores?

Los hilos tensores ayudan a tensar y recolocar la piel que se ha descolgado por la edad. De este modo, proporciona a la dermis una mayor firmeza y tersura, elevando los tejidos faciales. Por su efectividad, es uno de los tratamientos antiaging más demandado.

El tratamiento hilos tensores, también trabaja a nivel subcutáneo. En este sentido, hay que tener en cuenta que la polidioxanona estimula la producción natural de elastina y colágeno alrededor de las hebras insertadas. El resultado es un lifting facial sin cirugía, con lo que se logra disminuir la flacidez y recuperar la firmeza y la elasticidad de la piel. Estará mucho más suave y luminosa, visiblemente rejuvenecida.

Pide una cita


    Es un tratamiento que produce un dolor leve que se tolera bien en general. Utilizamos anestésico local para minimizar el dolor del procedimiento que tiene una duración de unos 45-60 minutos.

    La duración de los hilos tensores varía en función de cuáles utilicemos y va desde los 6 a los 12 meses aproximadamente. Por ello se recomienda realizar el tratamiento entre 1 y dos veces al año.

    Los resultados ya comienzan a observarse de forma inmediata por el efecto de tracción de los hilos, pero el verdadero efecto de producción de colágeno no se hace evidente hasta pasados entre 1 y 2 meses, motivo por el cual realizamos una revisión del tratamiento normalmente a partir del mes.

    No es necesario ningún cuidado pre-tratamiento específico aunque se recomienda evitar el consumo de alcohol. En personas con tendencia a infecciones herpéticas se suele recomendar realizar una profilaxis antiherpética los días anteriores.
    Después del tratamiento siempre recomendamos al paciente que no masajee la zona tratada, y que evite ejercicio físico, saunas o piscinas. En algunos casos se puede pautar una medicación para ayudar a prevenir o disminuir la inflamación resultante del tratamiento o para evitar infecciones.

    Como todos los tratamientos, siempre conllevan algún riesgo. Los más frecuentes en el caso los hilos tensores son la aparición de hematomas y de forma menos común que se pueda palpar alguno de los hilos.

    ¿En qué casos realizamos el tratamiento con hilos tensores?

    El tratamiento con hilos tensores está especialmente recomendado para hombres y mujeres que deseen revertir los primeros signos de la edad en la piel, como las arrugas o los surcos demasiado profundos. Hay que señalar que esta técnica no es aconsejable para pieles maduras, con una flacidez excesiva o arrugas muy pronunciadas.

    Flacidez en cara

    El tratamiento facial con hilos tensores puede solucionar fundamentalmente tres problemas: la flacidez, el volumen y el sostén arquitectónico facial.

    Mejora la flacidez por su efecto mecánico de tensar los tejidos donde se implantan, por eso su efecto lifting.

    Mejora el volumen porque reposiciona los compartimentos grasos faciales, sobre todo superficiales de las mejillas y de la zona mandibular.

    Mejora el sostén porque crea una malla con formación de colágeno alrededor que hacen que la dermis sea más gruesa y que los puntos de sostén ligamentoso facial sean más fuertes. Esto es muy notorio sobre todo en un tipo de hilos que están recubiertos por ácido hialurónico, ya que dan más pulposidad a la piel y esta pierde el aspecto resquebrajado.

    En resumen, el tratamiento de hilos tensores en la cara permite elevar zonas estratégicas del rostro como pómulos y cejas, define la línea mandibular, ayuda a reafirmar la piel del cuello y mejora el doble mentón y por último, reafirma el contorno facial y aporta simetría a la cara.

    Flacidez en muslos

    En el caso de tratamiento con hilos tensores en muslos, estos suelen colocarse en la cara interior de dicho muslo, donde se produce un mayor descolgamiento de la piel. El tratamiento actúa en dos etapas. En la más inmediata actúa el efecto mecánico del hilo, produciendo un efecto de tracción. Posteriormente, los hilos conseguirán que se reactive la producción de colágeno, lo que hará que la piel gane volumen y pierda su flacidez anterior.

    Flacidez en cuello

    El tratamiento con hilos tensores en el cuello está indicado cuando esta zona presenta arrugas finas y una flacidez moderada. Se puede aplicar en todo el cuello, insistiendo en la zona central que es la que presenta más signos de flacidez.

    ¿Cómo es el proceso de colocación de los hilos tensores?

    Es un tratamiento que produce un dolor leve que se tolera bien en general. Utilizamos anestésico local para minimizar el dolor del procedimiento que tiene una duración de unos 45-60 minutos. Es un procedimiento ambulatorio y no requiere incisiones ni puntos de sutura, por lo cual, no deja cicatrices.  Los hilos deben colocarse de forma que puedan dar soporte a la piel y crear un efecto de elevación

    No es necesario ningún cuidado pretratamiento específico, aunque se recomienda evitar el consumo de alcohol. En personas con tendencia a infecciones herpéticas se suele recomendar realizar una profilaxis antiherpética los días anteriores.
    Después del tratamiento siempre recomendamos al paciente que no masajee la zona tratada, y que evite ejercicio físico, saunas o piscinas. En algunos casos se puede pautar una medicación para ayudar a prevenir o disminuir la inflamación resultante del tratamiento o para evitar infecciones.

    Los resultados ya comienzan a observarse de forma inmediata por el efecto de tracción de los hilos, pero el verdadero efecto de producción de colágeno no se hace evidente hasta pasados entre 1 y 2 meses, motivo por el cual en SkinMed Clinic realizamos una revisión del tratamiento normalmente a partir del mes. La duración del tratamiento con hilos tensores varía en función de cuáles utilicemos y va desde los 6 a los 12 meses aproximadamente. Por ello se recomienda realizar el tratamiento entre 1 y dos veces al año.

    Tratamiento con hilos tensores en Madrid: El precio

    El precio del tratamiento de hilos tensores en Madrid varía según la zona a tratar y el número de hilos que necesitemos poner según cada persona. Por eso es imprescindible una exploración exhaustiva de nuestro equipo médico para así calcular un presupuesto exacto.

    No obstante, el precio de tratamiento de hilos tensores suele ir desde los 500 euros en adelante.